Después de estar un buen rato por encima de las nubes el descenso abre un socavón en el estómago. Hace rato que quiero llorar. La gente viaja para llegar, yo para estar en el aire.
miércoles, 22 de septiembre de 2010
lunes, 29 de marzo de 2010
viernes, 5 de marzo de 2010
lunes, 15 de febrero de 2010
15-II-10
He revuelto todos los papeles. Quería saber si releyendo el pasado encontraría alguna sensación cinética. Ha sonado el teléfono y el corazón se me ha disparado con la compresiónde un fusil. No eras tú. Imposible probabilidad encontrarte tras el auricular. Se me han caído todos de las manos.Tú ya no existes. Ese mundo
comprendido en la reflexión de tus ojos se me ha vuelto nublo, me asusta. No espero que vuelvas. Me duele el cuerpo como si, decididamente, me hubieran convertido en sombra. “Tú ya no existes”. Sólo beber y fumar me calman. Me ayudan a perdonar las horas. Sí, beber. Gracias que no lo haya descubierto antes. No te hubiera hecho ni caso conociendo el sueño de un calor tan parecido al tuyo. No puedo mirar las fotos. Me siento reencarnada sin haberlo pedido. Me calzo las zapatillas. Efectivamente eras incapaz de luchar por
el amor. Yo aún, después de haberte matado,te espero. He bajado a la calle. Es imposible ver una película sin despedidas. No iré al cine. La vecina venía a emboscarme. He querido subir las escaleras corriendo sin encender la luz. Lo he suplicado. He clamado a Dios oscuridad. Ha encendido la luz. Me ha saludo y he vuelto a sonreírla con los dientes llenos de lágrimas.
22-XI-09
-La próxima vez que te atrevas a tratarme de este modo voy a dejarte-, te he dicho. -¿Ah, sí?; -¡Sí!
Tu silencio ha llenado toda la casa y has apagado el televisor. Otra vez más, sin poder entretenerme con los colores proyectados por la pantalla, he reflexionado sobre mi oficio. He puesto mis manos en remojo y sin que nunca me gustase el barro más que a ti, he reproducido con otras formas nuestro futuro.
Tu silencio ha llenado toda la casa y has apagado el televisor. Otra vez más, sin poder entretenerme con los colores proyectados por la pantalla, he reflexionado sobre mi oficio. He puesto mis manos en remojo y sin que nunca me gustase el barro más que a ti, he reproducido con otras formas nuestro futuro.
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